
Prensa ABAE. — La tecnología espacial se ha consolidado como una herramienta transformadora en la gestión sanitaria global, permitiendo optimizar recursos médicos, responder eficazmente ante emergencias de salud pública y fortalecer la investigación biomédica, con particular beneficio para comunidades de difícil acceso y poblaciones vulnerables.
Los satélites de telecomunicaciones y observación terrestre proporcionan capacidades únicas para acceder a datos estratégicos de salud y procesar información médica desde grandes distancias. En Venezuela, la Agencia Bolivariana para Actividades Espaciales (ABAE), ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt), aprovecha estas tecnologías mediante el procesamiento especializado de datos satelitales, generando productos de alta precisión que fortalecen significativamente las capacidades sanitarias del país.
Conectividad satelital y vigilancia epidemiológica
El Director de Investigación e Innovación Espacial de la ABAE, Gustavo Guédez, destacó el creciente impacto de la tecnología espacial en sectores clave como la telemedicina, la vigilancia epidemiológica y la gestión de desastres.
«A través de la conectividad satelital es posible llevar servicios médicos a zonas remotas, permitiendo implementar redes de telemedicina que benefician a comunidades aisladas con acceso limitado a centros de salud», precisó Guédez.
El especialista enfatizó que «los satélites para la observación de la Tierra permiten monitorear factores ambientales que afectan la salud pública, como la calidad del aire, la contaminación de cuerpos de agua o la proliferación de vectores epidemiológicos. Esta información es clave para la prevención de enfermedades como el dengue o la malaria, y para la toma de decisiones en epidemiología».
Durante emergencias como inundaciones, sismos y huracanes, la tecnología espacial facilita respuestas coordinadas y rápidas, optimizando el envío de ayuda humanitaria y la evaluación de daños en infraestructura sanitaria crítica.
El espacio como laboratorio para la salud terrestre
Los experimentos en microgravedad ofrecen oportunidades únicas para estudiar procesos biológicos humanos, particularmente los efectos del envejecimiento y enfermedades como la osteoporosis. En condiciones orbitales, los cambios en la densidad ósea se aceleran considerablemente, permitiendo evaluar medicamentos y comprender procesos que en la Tierra requieren años de investigación.
La manufactura aditiva o impresión 3D en el espacio representa una frontera prometedora, facilitando la fabricación de tejidos humanos y medicamentos personalizados bajo condiciones controladas.
En este contexto, la ABAE desarrolla en su sede de Borburata, estado Carabobo, un proyecto pionero de modelado e impresión 3D que constituye un avance tecnológico significativo para el sector salud venezolano.
Yoseli Guaramato, ingeniera en sistemas y jefa de la Unidad de Logística de Producción de la Dirección de Investigación e Innovación (DII), explicó que «el modelado e impresión 3D permite la fabricación bajo demanda personalizada, lo que es ideal para aplicaciones médicas. Planificar procedimientos quirúrgicos complejos con antelación en cuanto a prótesis e implantes aumenta la precisión, reduce el tiempo de la cirugía y mejora los resultados para el paciente».
La ABAE, como ente ejecutor de las políticas y lineamientos del órgano rector en materia de ciencia y tecnología, para la exploración y uso con fines pacíficos del espacio ultraterrestre, continúa impulsando capacidades autónomas, formando talento humano especializado y promoviendo la investigación científica multidisciplinaria que beneficia directamente a la población nacional.